Los niños se aburren en la escuela. Deberes y más deberes, exámenes en los que prima el ejercicio de la memoria de textos que pronto olvidarán…. A pesar de vivir en el mundo de internet, con posibilidad de acceso libre y gratuito a todo, nuestros hijos se siguen educando igual que lo hicieron sus padres y sus abuelos. Nada ha cambiado.
Sin embargo, hay una tendencia creciente: la educación debe cambiar. Todos parecen de acuerdo. El análisis de las inteligencias múltiples confirma que no todos tenemos las mismas habilidades para lo mismo. Y las terapias humanistas reafirman la necesidad de cambiar la metodología de la educación tradicional para conseguir personas que crecen en su formación profesional y personal.
Es hora de cambiar. No es posible entender la Educación actual como una extensión de la que se impartía hace 20, 30 o 50 años. El mundo ha cambiado. ¿A qué esperamos para cambiar la Educación?